RESUMEN: Haz que la Planeación Estratégica deje de ser “un sueño” y se convierta en realidad; puede lograrse a través de objetivos bien trazados.
CIUDAD DE MÉXICO.- Uno de los temas recurrentes en el que mis clientes piden que nos enfoquemos, es en la Planeación Estratégica –ya sea para mejorarla o para formalizarla–.
Un reporte realizado en 2016 por el Instituto del Fracaso, explicaba que, en México, 75% de las startups cierran operaciones tras su segundo año de existencia.
Si bien hay muchos factores, algunos de ellos tienen que ver con finanzas débiles, planeación deficiente, falta de objetivos claros y problemas en la ejecución.
¿Para qué sirve una buena planeación?
La Planeación Estratégica es una herramienta de gestión que permite establecer el camino y el quehacer de las organizaciones para que puedan alcanzar los objetivos previstos, teniendo en cuenta todos los cambios que hay en el entorno, especialmente en el actual.
Sin embargo, ocurre muy seguido que la planeación no se lleva a cabo. En sesiones de coaching y mentoring con mis clientes he notado que estas “trabas” pasan porque la planeación es demasiado compleja, es decir, se espera mucho más de lo que se puede hacer.
Muchas veces, esto hace que en los momentos de ejecución, la planeación se olvide o tenga que hacerse a un lado para resolver los problemas que surgen día a día, los famosos “bomberazos”.
Un consejo que puedo darte, es que reflexiones qué necesitas para hacer una planeación estratégica; y si ya la tienes, ¿qué necesitas para que funcione? Analiza a profundidad cuáles son las causas de la funcionalidad o disfuncionalidad.
Día a día nos enfrentamos con nuevos retos para mantener el crecimiento y que nuestros clientes vivan una experiencia al comprar nuestro producto o servicio.
De ahí que en el mundo de los negocios sea tan importante contar con una adecuada planeación estratégica que pueda dar orden y seguridad en el hacer para diseñar el crecimiento y futuro del negocio.
Es de suma importancia que todos en el equipo se integren e identifiquen con las metas que quieren lograr. Aquí, el plan desarrolla el: “¿cómo lo van a lograr?” y “¿qué van hacer para lograrlo?”
Algunas preguntas que deben responderse son:
- ¿Los objetivos son viables? (¿de verdad podemos conseguirlos?)
- ¿Cómo vamos a conseguirlos? (¿qué dirección se va a tomar para encaminar todos los esfuerzos?)
- ¿Qué vamos a hacer para llegar a los objetivos? (acciones concretas)
- ¿Qué recursos tenemos? (factor humano y recursos materiales y financieros)
- ¿Qué necesitamos para conseguirlos? (capacidades y compromisos grupales e individuales)
- ¿Quién es son los responsables? (delimitar los roles y las actividades de cada miembro del equipo)
- ¿Cómo nos vamos a medir? (medición)
- En caso de no alcanzar nuestros objetivos, ¿qué vamos a replantear? (¿qué otros caminos pueden tomarse?)
Recuerda que, como líder, un punto muy importante es reconocer la participación de tu equipo. Si ellos saben que realmente están haciendo bien sus actividades, podrán comprometerse más con la empresa y con cada uno de los proyectos.
La clave para que funcione un plan es que el líder de seguimiento, revise el plan y su ejecución con su equipo de trabajo.
¿Qué estrategias podrías considerar para 2021?
Sin duda, la pandemia trajo consigo grandes cambios en todos los ámbitos tanto personales como laborales.
Específicamente, en lo laboral tuvimos que readaptarnos a la nueva realidad y, desde ahí, crear nuestro trabajo empresarial: home office y teletrabajo, juntas virtuales, mucha más presencia en e-commerce, etcétera.
La consigna de 2020, que fue “necesito llegar a mi cliente sin tener contacto ¿Cómo? vendiendo online y necesito hacerlo ya”, puede y debe cambiar por “ya sé hacerlo y migro apropiadamente hacia las tendencias (que ya desde hace algunos años se veían)”.
Tres elementos sustanciales para cualquier organización que quiera subsistir en esta era de cambio, deben ser:
♦ Digitalización y automatización: puedes ayudarte de los motores de búsqueda, SEO y segmentación de público.
♦ Mantenerse ‘fit’: mantén los costos de operación al mínimo posible, trata de eliminar tus deudas y pagos a proveedores, busca maneras para tener un “colchón” de ahorro.
♦ Estrategias de e-commerce: esta parte de la empresa se ha vuelto esencial para las compañías.
*Análisis Global Failure Index (2017)