Su propósito es la reubicación de empleados que, por diferentes circunstancias, la empresa debe prescindir de su participación. En la mayoría de los casos sucede por fusiones, reestructuraciones o reingeniería de la empresa.
Comúnmente, estos procesos se llevan a cabo con personas que llevan mucho tiempo en la empresa y su nivel se ubica en Gerencia o Dirección.
Este tipo de decisiones impactan en las personas involucradas; el primer paso en este proceso reside en la contención del empleado que será reubicado. Una vez que se explica la situación por la que se atraviesa, se comienza un trabajo conjunto para orientar al empleado y reingresarlo al campo laboral.
El acompañamiento en este proceso puede ser enriquecido por un seguimiento que permita que la persona re-formule un plan de vida y carrera para cumplir metas personales y laborales.