En la actualidad, el coaching deportivo es una disciplina netamente incipiente, pero con una gran demanda, por tanto, por desarrollar, divulgarse, promoverse y aplicarse para un mayor aprovechamiento tanto de entrenadores como de deportistas.
Entendamos que el coach es la persona que juega un papel sumamente relevante para el jugador o equipo, ya que se suma a los objetivos del entrenador deportivo y coadyuva al ocuparse de que el deportista o equipo consigan sus objetivos o retos deportivos. Mientras que el entrenador se centra en la técnica, la ejecución, la estrategia de actuación, el tipo de entrenamiento y rutinas, la condición física requerida de los jugadores, la disciplina, el coach deportivo lo hace desde el propósito, los objetivos, las motivaciones, las creencias ante las adversidades, al mejoramiento de su rendimiento con apoyo de planes de acción. Este es el terreno en los que los entrenadores tradicionales o especializados en el deporte no suelen manejar.
¿Qué es el coaching?
Timothy Gallwey (1971), nos habla de que “el juego interior” tiene lugar en la mente, y que tenemos que jugar contra los obstáculos del miedo y la desconfianza que existen dentro der “ser”, así mismo para John Whitmore, el coaching consiste en liberar el potencial de las personas para incrementar al máximo su desempeño. Koch (1981) desde el área deportiva define el coaching como la preparación o entrenamiento, y el coach como el preparador o entrenador, que dirige y activa equipos deportivos, mediante el logro de interacciones efectivas. Es quien enseña, mejora y desarrolla capacidades y técnicas Useche (2004).
El coaching es una metodología conversacional que promueve estados mentales y emocionales óptimos para el logro de metas, por lo que se centra en facilitar a la persona durante el proceso que implica transitar desde un estado inicial a uno deseado y en ello, incita cada vez un mejor desarrollo profesional y personal de las personas y que influye en la transformación de éstas, generando cambios de perspectiva, aumentando la motivación, fortaleciendo su autoestima, incrementando el compromiso ante ellas mismas y afianzando la asimilación de su responsabilidad.
Existen diferentes clasificaciones de los tipos de coaching. Principalmente podemos hablar del Cognitivo (con o sin Programación Neuro-lingüística PNL), Sistémico, Ontológico.
El coaching deportivo es el tipo de intervención más utilizado en el ámbito de la competencia. Siempre se ha considerado que el entrenador de un equipo o deportista es su coach, pero esta figura difiere mucho de la función de un coach deportivo. De esta figura hablaremos algo a continuación.
El coach deportivo se centra desde la clarificación de las expectativas, establecimiento del estado deseado y definición de la meta del deportista o equipo hasta su consecución de ésta. Con base a un plan de Acción, el acompañamiento se da durante el proceso y se conversa en lo que está promoviendo su avance y lo que lo está impidiendo. Ejecuta tres grandes funciones: 1) Reflexión: hace que el deportista medite, tome conciencia de la situación y de sus puntos críticos de sí mismo para alcanzar el alto rendimiento, analice lo que sucede en cada etapa de su proceso y las opciones disponibles para cada caso; 2) Libertad: el coach deportivo invita a que el otro (persona o equipo) hagan uso de su libertad interna para elegir intereses, pensamientos, emociones, lenguaje y acciones que le ayuden a avanzar en dirección a su meta, y 3) Responsabilidad: al reconocer el total control de su proceso interno, asume la responsabilidad de las consecuencias de sus elecciones, nivel de entrega, su tipo de desempeño y comportamientos, el ritmo de sus avances como los resultados obtenidos. En cambio, el entrenador evalúa, califica, orienta, señala y corrige posturas, movimientos con base a los resultados alcanzados por el deportista o equipo.
El entrenador tiene el objetivo de que el deportista o el equipo gane y para eso les enseña técnicas, establece estrategias y señala tácticas, evalúa la condición física, estudia a los adversarios y la tabla de posiciones para siempre ver posibilidades de ganar, esto dentro de los entrenamientos y a la hora de competir. El coach deportivo tiene el objetivo de que el deportista consiga sacar a la luz su mejor versión en un proceso de mejora continua, que sea fiel a sí mismo en todo momento, diseñe estados mentales y emocionales óptimos para ejecutar y desde ahí consiga sus objetivos deportivos.
El coach deportivo no juzga, hace que sea el propio deportista quien evalúe su desempeño. El coach deportivo se ocupa de que el deportista crea más en sí mismo, que actúe con disciplina y mayor confianza, que cambie aquellos pensamientos limitantes, que se centre en su potencial y en sus habilidades con la intención deliberada de promover su mejor versión cada día. Dado que la competición deportiva es muy exigente y fría, el coach deportivo ayuda a que los deportistas se preparen para gestionar tanto el fracaso como el éxito para que ninguno de los dos afecte o entorpezca el rendimiento físico y mental y evitar “bajones” en la forma de ejecutar lo que hacen.
Con forme pasa el tiempo, cada vez es más evidente y necesario que los deportistas de alto rendimiento –olímpicos o profesionales- cuenten con coaches deportivos que les preparen y ayuden en el terreno más actitudinal para ser los mejores.
Cuatro pasos en la aplicación del coaching deportivo
- Toma de conciencia. El deportista debe darse cuenta de sí mismo en todo momento del proceso, en cuanto a lo que piensa, siente y actúa.
- Saber. Es fundamental tener el completo conocimiento técnico en cuanto al deporte que se practica
- Querer. Se parte de la voluntad del deportista o equipo, por lo que se debe tener gusto por la actividad misma, contar con un fuerte deseo de triunfar y una voluntad forjada de lograrlo una vez que ha localizado su objetivo.
- Actuar. Dar el paso pare llevar a cabo las acciones necesarias a lo largo de su proceso que le lleven a través del tiempo al dominio de sí mismo, a la destreza de la actividad, al manejo de la presión del público y los medios de comunicación para llegar así al grado de catalogarse de alto rendimiento.
¿Qué beneficios ofrece el coaching deportivo?
- Incrementa la conciencia de los jugadores al ayudarles a conocerse mejor como individuos;
- Ayuda a planificar de forma más estructurada y realista sus aspiraciones;
- Libera mentalmente al deportista al trabajar con creencias limitantes;
- Fortalece al jugador emocionalmente para alcanzar el máximo potencial;
- Dirige hacia la productividad ante los obstáculos al abrir posibilidades;
- Favorece la gestión de las emociones ante las diversas presiones y posibles resultados;
- Aumenta la concentración, mantiene al jugador enfocado en su meta, actuación, desempeño y meta;
- Empodera al deportista o equipo al inducirles hacia la propia gestión;
- Estimula el entusiasmo e incrementa la motivación
- Reduce la frustración
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